sábado, 16 de noviembre de 2013

MARZO VEINTINUEVE



Por qué en este día hay tanto dolor
por qué amanece con tanta tristeza
por qué la mañana no tiene color
por qué hoy te niegas a tanta belleza.

Por qué tú te empeñas en recordar
por qué no quieres sentirte feliz
por qué no piensas que es mejor olvidar
por qué no borrar esa cicatriz.

Por qué no perdonas si eres cristiano
por qué no terminas también con el duelo
por qué no quieres estrechar esa mano
por qué tú te encierras en el desconsuelo.

Tú quieres respuestas a tantos por qué
tú vives feliz en tu mundo irreal
acaso no sabes que un día tal vez
un golpe termine con tu ingenuidad.

Por qué no preguntas lo que pasó
por qué no preguntas quien fue el responsable
por qué no preguntas por qué sucedió
por qué no preguntas si fuimos culpables.

Un día soñamos un tiempo mejor
un día quisimos cambiar el sistema
un día apoyamos a don Salvador
un día alzamos también las banderas.

Que ilusos y que ciegos fuimos
cómo pudimos ser tan ingenuos     
con la felicidad del triunfo no vimos
que del poder no éramos dueños.

La derecha, la C.I.A. y los empresarios
que en el pueblo veían a sus enemigos
por salvar sus riquezas se dieron la mano
y a los militares llamaron amigos.

El mes de septiembre se confabularon
de madrugada llegó el fatal día
al pueblo inocente a balas mataron
y en La Moneda Allende moría.

Si al socialismo por las urnas llegamos
si la revolución no fue consecuente
si nunca tuvimos un arma en la mano
¿cómo defender a nuestro presidente?

Tuvimos tal vez muy graves errores
quizás aún no los reconocemos
pero no se justifican los grandes horrores
que se han cometido en contra del pueblo.

Si tú no estuvieras aquí conversando
si hubieses sido tú quien cayó en el camino
te estaríamos todos llorando
como a Guerrero, Parada y Nattino.